Esta crema que les traigo hoy es una auténtica fantasía para el paladar. Tiene una textura maravillosa y un sabor delicioso.
Además se puede comer tal cual, untada en unas tostadas o en unas galletas, la podemos usar para alegrar un yogur natural, podemos preparar postres con ella o, como en mi caso de hoy, ser la acompañante perfecta para una tarta de queso.
Para hacerla he utilizado pulpa de maracuyá congelada. Aquí la consigo en las tiendas Cinco Océanos. Lo que hago es descongelarla previamente antes de utilizarla.
- 230 gr. de pulpa de maracuyá.
- Tres huevos talla L.
- 150 gr. de azúcar.
- 50 gr. de mantequilla.
Luego la cubrimos con papel film a piel y la dejamos enfriar a temperatura ambiente.
Cuando ya esté fría, la pasamos a unos botes de cristal y la metemos en la nevera, mejor hasta el día siguiente porque con el frío cogerá aún más cuerpo.
Ya tenemos nuestra crema lista para disfrutarla como más nos guste.
Una fantasía de crema tanto por su textura como por su sabor.
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