TARTA FRÍA DE ALBARICOQUE
martes, julio 11, 2023
Hola a todos y a todas. ¿Cómo va ese verano? Supongo que pasando calor que es lo que toca.
La última receta que les dejé por aquí fue una Gallete de albaricoques aprovechando que están en temporada. Pero claro, para hacer ese rico pastel hay que encender el horno y, la verdad, con el calor, no apetece demasiado.
Pero como sigue habiendo albaricoques, y aprovechando que había hecho Mermelada de albaricoques para regalar, he preparado una rica tarta con esta deliciosa fruta que no necesita horno, que es muy sencilla y que además queda bien deliciosa y fresquita.
Para la base:
- 100 gr. de galletas tipo Digestive.
- 50 gr. de mantequilla derretida.
- 200 gr. de queso crema.
- 100 gr. de mermelada de albaricoques (Pincha aquí para ver cómo hacerla casera).
- 50 gr. de azúcar.
- Tres hojas de gelatina neutra (5 gr.)
- 200 ml. de nata para montar bien fría).
- 100 gr. de mermelada de albaricoque.
- Una hoja de gelatina neutra.
Ponemos las galletas troceadas en una picadora y la molemos bien.
Añadimos la mantequilla derretida y seguimos mezclando hasta que se forme una pasta.
Para el relleno ponemos las hojas de gelatina a hidratar en agua durante unos cinco minutos.
En un bol amplio ponemos el queso crema, la mermelada y el azúcar y mezclamos bien con varillas.
En otro bol montamos la nata con varillas eléctricas. No es necesario que nos quede muy firme.
Ponemos la gelatina en un cuenco junto con dos o tres cucharadas de agua y calentamos unos segundo en el microondas. Removemos para que se disuelva bien.
Ponemos las galletas en el molde, previamente con papel en el fondo y los bordes forrados. Aplastamos bien para que quede compacta.
Llevamos a la nevera mientras preparamos el relleno.
Unimos a la mezcla de mermelada y queso y removemos bien.
Ahora añadimos la nata montada e integramos con movimientos envolventes hasta que esté homogéneo.
Pasado el tiempo preparamos la cobertura.
Vertemos la mezcla en el molde, alisamos y llevamos a la nevera tres o cuatro horas.
Ponemos a hidratar la gelatina en agua.
Ponemos la mermelada en un cuenco y la calentamos en el microondas unos 20-30 segundos.
Añadimos al gelatina escurrida a la mermelada caliente y removemos bien para que se disuelva.
Dejamos que se quede a temperatura ambiente antes de ponerla sobre la tarta.
Vertemos la mermelada sobre el relleno y llevamos a la nevera al menos cuatro horas, aunque lo mejor es dejarla hasta el día siguiente.
Una vez cuajada la pasamos a un plato de servir.
La conservamos en la nevera hasta el momento de consumirla.
Miren qué bonitas se ven las tres capas.
Nos cortamos un trozo y disfrutamos.
Miren el corte de cerca; como se aprecia la cremosidad que tiene.
Una tarta sencilla, fresquita y deliciosa.
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